miércoles, 20 de junio de 2012
decoracion reciclada
GUADALAJARA, JALISCO (01/JUN/2012).- La pérdida, deterioro y contaminación de territorios naturales como los bosques, las playas y el mismo entorno urbano, han generado ideas para resarcir, en lo posible, el daño causado al ambiente con un concepto que radica en la sustentabilidad, la reutilización y el reciclaje.
La creatividad y el ingenio hacen magia con aquellos elementos considerados como desechos o basura, que aplicados de otra forma, crean ambientes “ecológicos”; reduciendo hasta 50% la contaminación generada al mes por un solo individuo.
Existen claros ejemplos que explican cómo la decoración ecológica y la reutilización de elementos brindan al espacio una armonía y equilibrio directo entre la Naturaleza y los artículos industriales. La diseñadora de interiores sudafricana, Katie Thompson, es un referente internacional por su destacable trabajo en la reutilización y reciclado de muebles.
Aunque parezca increíble, y más que complicado, la experta en interiorismo es capaz de convertir una maleta vieja a un confortable sillón de estilo modernista o una serie de repisas para decorar la pared. El secreto para hacer servible lo inservible, es conocer técnicas básicas de corte, confección y pegados.
Tú puedes hacerlo
Las redes sociales como Facebook y Twitter han fungido como herramientas para difundir las nuevas tendencias en lo que a decoración reciclada, ecológica o verde se refiere. Basta con ahondar en los buscadores de internet para toparse con un abanico de ideas que parten de la reutilización.
No es necesario ser un erudito en decoración y reciclado para recrear artículos “sacados de la basura”, literalmente. Siguiendo instrucciones muy básicas y con la práctica constante, podrás hacer de una botella de plástico una escoba. De unos ladrillos unas macetas, y de focos fundidos una ecléctica lámpara.
Tras una minuciosa depuración de ropa desgastada o/y que no utilizas, puedes crear cortinas, cojines, tapetes, bolsos y hasta más sábanas, con un collage de texturas, colores y tamaños. Basta con recortar cuadros, rectángulos o cualquier forma que te agrade, y coserlos entre sí por cada lado hasta formar una especie de saco, que puedes rellenarlo con los pedazos sobrantes de tela o espuma de polietileno.
Es común que al finalizar una obra arquitectónica sobren unos cuantos ladrillos. Para no tenerlos amontonados y en total olvido por algún rincón del hogar, puedes convertirlos en pulcras macetas para plantas pequeñas. Los de tipo hueco –que tienen orificios pasantes en su interior– son idóneos para los rosales, margaritas, cactus, y hasta menta y hierbabuena.
Otro elemento que reina en la decoración reciclada es la madera, principalmente las cajas fruteras que sobran en el mercado. Éstas pueden transformarse en banquitos de descanso, libreros, mesas de centro o hasta bases para colchón.
Dependiendo del espacio que dispongas, será la cantidad de cajas que necesitarás. Ejemplo: apila verticalmente hasta tres cajones por su lado más ancho para organizar libros, DVD, discos y ropa ligera como la interior, camisas o blusas.
Para una mesa de centro, bastarán cuatro cajas unidas con clavos o pegamento industrial entre sus lados interiores, y así progresivamente para una base de colchón o muebles para mayor capacidad.
Al rescate
Como parte de la tendencia ecologista, la decoración reciclada no sólo se abastece de los desechos propios de cada hogar, sino también de la basura tirada en las calles. Opta por rescatar a botellas y envases de plástico y vidrio, y latas para convertirlas en funcionales lámparas, porta revistas, bases de velas, macetas y porta lápices.
Recortando las botellas de plástico por la mitad o con un orificio en el centro puedes rellenarlas de condimentos (azúcar, sal, pimienta), especias y hasta tierra para flores colgadas en la pared. Por otra parte, la base de la misma puede servir para portar velas.
Los focos fundidos, al ser limpiados en su interior, también pueden servir con condimenteros o lámparas de aceite con mecha.
Si tienes una escalera de madera y no la utilizas, bien puede ser un perchero o la base para su guardarropa. Adecuando su longitud al espacio del armario, sus extremos se apuntalan a la pared para brindarte mayor espacio para los ganchos de la ropa.
Toma nota
Inversión y colaboración
Además del reciclaje, es importante utilizar artículos que no contaminen tanto, como los focos ahorradores de bajo voltaje y separar la basura (orgánica e inorgánica) en bolsas textiles, así como decorar los muros con pinturas a base de agua.
Para ahorrar energía y aprovechar la luz natural, las cortinas traslúcidas brindarán mayor iluminación a los espacios.
Manos a la obra
Tapete con corchos de vino
Materiales:
- 175 corchos
- Regla
- Cortador: cutter o navaja
- Plataforma adhesiva
- Pistola encoladora
- Papel lija
Instrucciones:
Corta los corchos por la mitad y lija cada uno suavemente. Colócalos formando un rectángulo con el lado plano hacia abajo, aplica el pegamento a la parte plana y adhiérelos a la plataforma. Para evitar que se desprendan fácilmente, protege la periferia del conjunto de corchos con cinta, un listón o alambre.
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